Sierra Burgess otra película más de Netflix.

Las plataformas streaming están ganando una audiencia enorme, por lo cual Netflix está haciendo su tarea creando películas originales cada vez más seguido. El sello de la plataforma ya es casi garantía de un buen filme. Sin embargo, desde la última reseña que hice sobre Alex Strangelove he notado algo de ella en su nueva producción: "Sierra Burgess is a loser". 

De principio no me llamaba la atención, pues me había hecho una idea errónea de su historia. Después vi capturas de una escena y creí que era una historia de amor más allá del físico, esa idea  invita a cualquiera a querer verla. De todos modos, cuando ya tienes la experiencia pasó todo lo contrario: no me convenció del todo.

Nos muestran una adolescente que sufre por no pertenecer al canon de belleza, nos estereotipan a una chica mala tonta pero eso sí: bellísima. Hay que reconocer que lograron un gran desarrollo de personaje con Veronica, personalmente mi favorito. Sierra por otra parte, siento que su construcción no fue muy buena: era muy inteligente gratuitamente, y un poco vengativa.

La historia no me dio lo que ofrecía. Yo esperaba una historia de auto descubrimiento y amor propio, y fue una narración donde nos contaron la historia de una chica que no era lo suficientemente segura para decir la verdad. Sólo puedo decir que Noah Centineo estuvo en su papel, aquella escena donde trata tomarse la selfie sin camisa, la quiero enmarcar!

En este punto me enojé con Netflix, nos está ofreciendo otra película adolescente que quiere ser independiente. Abusaron de la música en escenas donde estaba de más, el filtro de la luz no reflejó nada sobre lo que se nos estaba contando, parecía estar ahí para darle un look retro. A pesar de ser muy distintas me dio muchos tintes a Alex Strangelove, y es así como no me interesó saber más del director/a y encargados del libreto.

Cabe aclarar que tiene muchos puntos a su favor la cinta, pero de momento no se me ocurren tantos, cumple su función de entretener, sin embargo estamos en un momento donde queremos substancia aunque sea dirigida a adolescentes.